¿POR QUÉ A MUCHOS SE LES DIFICULTA MEDITAR?
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En la actualidad, muy pocas personas pueden meditar, porque para poder meditar se requiere ser capaz de bien concentrarse y esta concentración depende del estado de paz interior adquirido, o sea de la capacidad de relajación. Ahora bien, si la meditación no es accesible para la mayoría, es porque la mayoría de los humanos luchan con sus problemas, con sus fantasmas, con sus traumatismos, y tan pronto como cierran sus ojos, todas esas cosas resurgen en sus mentes y no les permiten estar en ese estado de plena calma, para tener una perfecta concentración.
Por lo tanto, antes de embarcarse en la búsqueda de lo que es la mejor técnica de meditación para ustedes, primero analicen como está su estado emocional interior y si constatan que todavía tienen muchas preocupaciones, muchos traumas sin resolver, entonces primero busquen resolver ese estado por medio de un trabajo interior, por medio de un trabajo sobre su persona. Que les tome un mes o diez años, háganlo. Es la verdadera solución, porque las energías que se reciben durante la meditación son tan sutiles que no pueden circular si el cuerpo NO está relajado. Cuando el cuerpo está tenso, esas energías solo rozan a la persona y no entran en los chakras, se van a otro lugar, por lo tanto no sucede nada a nivel de su desarrollo.
El problema es que el lugar hacia donde van esas energías es en donde está enfocada la atención, y si los pensamientos están enfocados en las preocupaciones de la vida diaria, de la familia, del trabajo, en lugar de alimentar al meditador, esas energías van a alimentar a esos pensamientos de inquietud, a reforzarlos, y en vez de ser beneficiosas se vuelven perjudiciales porque encierran más a la persona en su neurosis.
Es muy importante que nada perturbe a la persona en el momento de recibir la energía. Insisto, porque he visto a tanta gente ponerse a meditar o simplemente querer captar energía llevando en ellos todas sus disputas de la oficina o de la familia, los resentimientos de esto o aquello, sus enojos, sus tristezas, todo tipo de exaltaciones sentimentales. Cuando la regla es que jamás hay que querer meditar para calmar los pensamientos negativos, las cóleras, etc.
Si uno se refiere a la verdadera meditación, no podrán efectuarla que si primero hacen ese trabajo de limpieza interior, y antes de llegar a este punto, tómense el tiempo para relajarse y captar energía. Al relajarse, casi automáticamente absorben energía. Cada vez que alejan las tinieblas (incluso las emocionales) la luz entra. Pueden utilizar los métodos de relajación que ya existen o pueden inventar su propio método, pero deben saber que para que la relajación sea eficaz, tiene que ser guiada, porque la mente necesita el apoyo de la orden, lo que no tiene nada que ver con la hipnosis, aunque el procedimiento es más o menos el mismo.
Cuando se den cuenta de que tienen más estabilidad, de que ya no se enfurecen por tal o cual cosa, que actúan de forma desapegada contra tal evento, o que tienen una forma de conocimiento espontáneo de las cosas, entonces es la señal que pueden pasar a la verdadera meditación.
En la actualidad hay mucha gente que va de gurú en gurú, de técnica en técnica, con la esperanza de encontrar la meditación que mejor les convenga, y aunque sólo sea por quince días se dicen: “Esta meditación si es fantástica. Por fin encontré al maestro que buscaba, porque me dio la meditación que necesitaba.”
“Medio extremista el gurú que me encontré,
pero tengo que admitir que la meditación que me dio es genial.
¡Siento que estoy flotando!”
El problema es que después de un tiempo se dan cuenta que la nueva meditación no les funciona realmente y entonces van a buscar una nueva técnica. Y así como conejos no paran de brincar buscando la meditación milagrosa. Pero con esta forma de proceder, no la encontrarán, porque la meditación es ante todo un acto de comunión con las energías divinas y esta comunión no puede ocurrir si todavía no están listos. Entonces primero prepárense para esta comunión, y no se preocupen sí tal meditación funciona mejor que otra. Todas las meditaciones convienen si es una meditación que corresponde a sus necesidades. Y es por eso que la mayor parte de ustedes que quieren meditar, deben buscar meditaciones que sean principalmente terapéuticas, Busquen técnicas que les ayuden a sanar su estado interior.
Es por eso que hoy en día la gente está insatisfecha con las meditaciones de los iniciados, de los discípulos, porque no aportan los resultados que ellas esperan. Pero como ven, eso se debe porque las personas tienen todavía demasiadas preocupaciones, demasiados traumas y deben primero desprenderse de todo eso trabajando en ellos mismos, para poder obtener resultados.
Conociéndose a sí mismo y trabajando a liberarse de sus traumatismos, ustedes sentirán progresivamente una mejora, y entonces sí, comiencen la meditación. Y cuando lleguen a ese punto, ya no necesitarán preguntarme nada. Su guía interno los dirigirá hacia vuestro sendero, hacia el grupo, el tipo de meditación que más les conviene. Ustedes serán capaces de tomar sus caminos guiados invisiblemente. Yo solo les doy aquí los elementos de preparación. El círculo interior es para más adelante.
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